La cuarta edición del talent culinario de Antena 3, Top Chef, ya tiene a sus finalistas: Rakel Cernicharo y Víctor Gutiérrez, escogidos en la noche de ayer en una gala caracterizada por la originalidad y la dificultad de sus pruebas.
Los cocineros clasificados en la semifinal, Rakel, Montoro y Víctor, tuvieron que enfrentarse a tres pruebas muy diferentes. Pruebas que si las superaban con éxito les acercaría a la tan ansiada final.
En la primera prueba, y ante su sorpresa, los concursantes tuvieron que compartir fogones con los miembros del jurado de Top Chef. Rakel tuvo que cocinar con Susi Díaz, Víctor con Alberto Chicote y por último, Montoro con Paco Roncero. La dificultad de esta prueba residió en que los concursantes tuvieron que continuar con los platos elaborados inicialmente por sus compañeros.
Los platos resultantes de esta prueba fueron: “sopa de bogavante con pomelo”; “Susi vs Rakel” , un plato preparado con láminas de cigalas, coliflor, mayonesa y pistacho, entre otros, y “Chicote” (pata de ternera cocida, solomillo de ternera y arroz, entre otros).
Rakel, ganadora de esta primera fase, tuvo la oportunidad de escoger entre las propuestas que tenían que cocinar en la segunda prueba. Esta fase se caracterizó porque los cocineros tuvieron que preparar platos inspirados en grandes obras de la literatura española: El Quijote, El Lazarillo de Tormes y La Regenta.
Una prueba con mucha tradición en la que los aspirantes tuvieron la presión de demostrar lo mejor de sí mismos para clasificarse para la final. Pero no lo harían solos. Pudieron cocinar con los ganadores de las tres ediciones anteriores de Top Chef: Begoña, David y Marcell.
- El equipo de Víctor y Begoña cocinó un plato basado en El Lazarillo de Tormes: nabo confitado, con chuletitas de cordero confitadas y salsa.
- Rakel y David elaboraron un plato inspirado en El Quijote: lentejas, pechuga de pichón, encurtidos y paté.
- Por último, Montoro y su compañero, Marcell, cocinaron rollitos de pera con salmón marinado, salsa de manzana y avellanas garrapiñadas, una reinterpretación del plato de La Regenta.
En esta ocasión, los platos de los concursantes fueron valorados por tres excepcionales chefs: Eneko Atxa, Martin Berasategui y Quique Dacosta. En su mano estaba la decisión de elegir al primer finalista de Top Chef 4. El jurado experto, que lo tuvo muy complicado, optó por que Rakel fuera la primera finalista de esta edición.
Por su parte, Montoro y Víctor tuvieron que enfrentarse de nuevo en la prueba la “Última Oportunidad”. En ella los aspirantes elaboraron un plato a partir de la interpretación de refranes españoles: “Pedir peras al olmo” (refrán que tuvo que representar Montoro) y “De la mar el salmón y de la tierra el jamón” (interpretación de Víctor).
El jurado proclamó a Víctor como el segundo finalista de la cuarta edición de Top Chef.