La cuarta temporada de Top Chef arrancó la noche del miércoles con fuerza en su primer programa con el objetivo de convertirse en el mejor talent culinario.
Catorce aspirantes tuvieron que competir cara a cara en dos pruebas para formar parte de los doce concursantes de Top Chef. La emoción estaba servida.
En la primera prueba, quizá la más compleja de la noche, se formaron 7 grupos compuestos por dos aspirantes. A cada grupo se le asignó un ave de caza distinta: becada, tórtola, perdiz, paloma o codorniz. Los cocineros de cada grupo tendrían que competir presentando al jurado la mejor propuesta. De este duelo solo saldría vencedor un aspirante y se convertiría en uno de los siete primeros concursantes de la nueva edición de Top Chef.
Entre los platos de la primera prueba, el jurado de Top Chef compuesto por Alberto Chicote, Susi Díaz y Paco Roncero, tuvo que elegir entre muchas y diferentes propuestas: paloma en dos cocciones, pechuga de azulón con su jugo escabechado o ensalada de becada. Los siete aspirantes que no superaron esta prueba tuvieron que seguir luchando en los fogones por conseguir el pase final al concurso.
En la segunda prueba, los cocineros tuvieron que preparar merluza acompañada de tamarindo, pomelo, papaya, nopal o arándanos. En esta prueba Susi Díaz dejó claro qué es lo que quería: “creatividad, imaginación y sabor”.
Entre las propuestas que se presentaron destacaron: lomo de merluza con salsa de queso y pomelos, merluza a baja temperatura con crema de tamarindo o taco de merluza con crema de papaya. De esta prueba, dos aspirantes se quedaron a muy poco de entrar en la cuarta temporada de Top Chef.
Sin duda la tensión, la emoción y la exigencia fueron los ingredientes principales del primer programa del concurso.
