La Denominación de Origen Rías Baixas afronta la vendimia 2016 con optimismo ante el excelente estado fitosanitario que presenta la uva, lo que pone en relieve la buena evolución del ciclo vegetativo hasta el momento de su recogida. De hecho, el Órgano de Control y Certificación se congratula por la gran calidad de la uva que está entrando en las bodegas amparadas por el Consejo Regulador y espera que esa sea la seña de identidad de la presente campaña.
Hasta el momento se han recogido alrededor de 8 millones de kilos de uva en las cinco subzonas. A día de hoy se encuentran en plena actividad 140 bodegas de las 183 inscritas.
Recordar que la cosecha de la pasada campaña en la Denominación de Origen Rías Baixas, calificada como “Muy Buena”, rozó los 32 millones de kilos de uva vendimiados. El documento de Estimación de la Cosecha 2016, elaborado por el Departamento Técnico del Consejo Regulador con la colaboración de los técnicos de las bodegas, prevé -para la presente campaña- una merma de entre el 10% y el 20% con relación al pasado año.
Al respecto de la presente campaña, el director técnico, Agustín Lago, explica que “las lluvias de la pasada semana fueron beneficiosas para el viñedo” y que, a tenor de las previsiones que apunta a una meteorología favorable, las expectativas son muy halagüeñas, dado que permitirá que la vendimia en esta denominación se realice de manera escalonada, ordenada y selectiva. Añade Lago que “las primeras partidas de uva se han destinado a la elaboración de los vinos espumosos, luego se han incorporado a la recogida las variedades blancas y, por último, se vendimiarán las uvas tintas”. Además, recuerda que una de las singularidades de la vendimia en Rías Baixas es la ausencia de mecanización: “Para el mayor cuidado en la conservación de las uvas, y buscando la máxima calidad, la recogida del fruto se hace íntegramente a mano habiéndose de procesar en un plazo inferior a 24 horas. Asimismo, recuerda que el Reglamento obliga a que su transporte se realice en cajas normalizadas con una capacidad de 20 kilos”.
El Consejo Regulador cuenta para esta campaña con el apoyo de 26 auditores que se responsabilizan del seguimiento de la vendimia en las bodegas, los viñedos y los transportes, “asegurándose que se cumplen las normas recogidas en el pliego de condiciones”, explica el director técnico, para quien “el sector está cada vez más profesionalizado y comprometido con la excelencia, lo que facilita el trabajo de los auditores y redunda en la calidad de los vinos”.
La vendimia en la Denominación de Origen Rías Baixas ha dado comienzo en las fechas previstas, pese a que se produjeron algunos cambios en el ciclo de la vid durante el año, propiciadas por las condiciones meteorológicas. Así, las bajas temperaturas y los temporales registrados a partir de marzo provocaron una brotación irregular: “Podemos hablar de una brotación temprana que experimentó una ralentización como consecuencia de las bajas temperaturas del mes de mayo. Consecuentemente, la purga se retrasó, alargándose más de lo normal”. El informe de Estimación de Vendimia 2016, también explica que “las mermas producidas en los viñedos de esta denominación de origen en la campaña 2016 se atribuyen básicamente al corrimiento de flor, así como a problemas en la purga, a los daños producidos por el mildiu y, en menor medida, por el oídio, granizo y heladas”.