El mito de la barriga cervecera se derrumba. Un estudio realizado por investigadores Academia Española de Nutrición y el departamento de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid desmiente que la cerveza sea la responsable de la llamada barriga cervecera.
Argumenta el estudio que una caña de 200 mililitros sólo aporta 84 kilocalorías, por lo que el consumo de una cerveza diaria supone un porcentaje "muy pequeño" de la ingesta calórica diaria recomendada. Demuestra además que las personas que tienen un consumo moderado y habitual de cerveza tienen una composición corporal más adecuada que los que no la toman, especialmente en el caso de los hombres.
"Los causantes de la barriga cervecera podrían ser otros factores como los hábitos alimentarios incorrectos, un estilo de vida sedentario, el tabaquismo y diversos componentes genéticos, lo que favorecen este tipo de obesidad e influyen en la composición corporal más que la cantidad de cerveza consumida", ha explicado Rosa María Ortega, catedrática de la UCM.