El prestigioso restaurante madrileño Lhardy con 175 años de historia, arte, literatura y gastronomía entre sus paredes fue el escenario del nacimiento de la Academia de la Tapa de Madrid, que promocionará la tapa como valor cultural, social, turístico, histórico y económico, y como una de las principales referencias de la gastronomía madrileña.
La entidad se constituyó formalmente con la firma del acta fundacional en la que se señala a la Academia como punto de encuentro entre las disciplinas y profesionales implicados en "la promoción y difusión de Madrid y su Comunidad como destino turístico gastronómico de calidad, de prestigio y de excelencia".
La Academia de la Tapa de Madrid, señalan, "rendirá culto a la tapa tradicional y a la mejor materia prima, y a su vez a la nueva tapa contemporánea, innovadora y vanguardista, la tapa de autor. Promocionará rutas de tapas y de enoturismo por Madrid y su región, mostrando sus productos, especialidades y su mejor hacer".
Fotografía: Joaquín Ruibérriz de Torres, Manuel Ángel de los Ríos Cañete, Jesús Flores Téllez y Emilio Garrido Polo en el restaurante Lhardy.