Las conservas hoy en día no están reñidas con la buena calidad. Y si no que se lo pregunten a Álvaro Miguélez. Es el jefe de ventas de Embutidos Lalinense, una empresa familiar que lleva 60 años en el negocio porcino y que acaba de sacar una línea de productos gourmet que apuesta por el cocido gallego presentado en una lata de conservas. «En quince minutos tienes un lacón con grelos preparado como en casa, con su patata y su chorizo. Sólo hay que calentarlo y emplatarlo».
Patrocinadores desde hace años del cocido de Lalín, la fiesta gastronómica por excelencia de la localidad, acaban de recibir la medalla Dagda como premio al Bocado del año. Un reconocimiento que otorga la revista de Hostelería y Turismo de Galicia junto con la asociación gallega de periodistas de turismo, AGAXET. «Hay que apostar por la innovación, siempre respetando la tradición y la calidad del producto, pero no te puedes estancar» dice Miguélez.
Esa sin duda una de las claves de las conservas de gama alta, que están escalando en ventas de forma incansable. Las nuevas formas de vida reducen el tiempo que podemos pasar en la cocina, pero que ello no implique renunciar a la calidad del buen bocado.
REDACCIÓN MENÚS.ES
