Al mal tiempo, buena cara, sobre todo si es febrero y hay buen lechazo por comer en la Ribera del Duero. Esta es la apuesta de 11 restaurantes y 10 bares de Peñafiel, Castrillo de Duero, Curiel de Duero, Pesquera de Duero y Valbuena de Duero que participan en las III Jornadas del Lechazo de la Ribera del Duero todos los sábados y domingos de febrero de 2014.
Sus menús degustación (32 € por persona) incluyen entrantes, plato principal, postre, vino de la Denominación de Origen Ribera del Duero, pan, agua y café. Pero, para evitar sorpresas antes de reservar o desplazarse, importante fijarse en el menú que oferta cada establecimiento adherido ya que, si bien la mayoría incluye como plato principal el tradicional asado castellano, otros se basan en diversas recetas de la tradición castellana o propuestas de vanguardia con el ovino como protagonista.
De buen comer, el asado tradicional de raza churra de la zona que elabora la Residencia Real Castillo de Curiel, en Curiel de Duero, cocinado sólo con agua, manteca y sal, y como manda la tradición, en horno de leña. Posicionado en la vanguardia y muy popular en la comarca de Peñafiel, adalid de la iniciativa y sede del Museo Provincial del Vino, el restaurante Alabrasa de Peñafiel ofrece platos como el pirulo de lechazo a la brasa con mahonesa especiada, timbal de escarola con pimiento asado y lechazo escabechado, y paletilla rellena a la brasa.
Menú bien ejecutado por sus dos jóvenes chefs y buen servicio. También durante los fines de semana de estas jornadas el lechazo se podrá degustar en los bares participantes en forma de tapa, por 2,50 €, acompañado de una copa de vino joven de la Denominación de Origen Ribera del Duero, denominación que se distribuye en cuatro provincias: Valladolid, Soria, Segovia y Burgos.
REDACCIÓN Ana Montes