Sus creaciones, no siempre convencionales, rompen en muchos casos con las pautas marcadas por la repostería francesa tradicional. A esto se le suma un estilo delicado y detallista que hace de sus postres auténticas obras de arte.
Procedente de la cuarta generación de pasteleros de la región francesa de Alsacia, inició su formación cuando tenía 14 años en París junto con Gaston Lenôtre, uno de los profesionales que más le ha marcado en su forma de entender este arte. Una década después, y durante once años, trabajó como jefe pastelero para la compañía francesa de comida gourmetFauchon, donde se producen tés, galletas, caramelos y chocolates principalmente. En 1997 inició sus andaduras en la prestigiosa pastelería Ladurée.
Al poco, decidió emprender creando su marca, Pierre Hermé Paris, y abriendo una boutique de pasteles y un Salón de Té, ambos en Tokio. En París no fue posible hasta que finalizó el periodo por el que Ladurée no le permitía abrir uno propio. En la actualidad ha ido expandiendo el negocio y tiene boutiques en Francia, Inglaterra, Japón y Emiratos Árabes Unidos.
Algunos de los títulos que avalan su carrera, aparte de ser considerado el «Picasso de la repostería» por la revista francesa Vogue, se encuentran el de haber sido nombrado el más joven «Chef Pastelero del Año en Francia» y el único que ha recibido la condecoración de «Caballero de las Artes y Letras».
Entre sus libros, que se han convertido en todo un éxito y de los que hay editados más de 20, podemos citar Php1- Antología de Pierre Hermé, donde se recopila el trabajo del chef en los últimos diez años, de 1995 1 2005; La pâtisserie de Pierre Hermé, que trata de transmitir la técnica, fórmulas, trucos y consejos a sus compañeros de profesión; y Rêves de pâtissier : 50 classiques de la pâtisserie réinventés de Pierre Hermé, donde nos descubre a través de 50 recetas los toques que hacen de sus dulces un manjar para el paladar.
REDACCIÓN Gastronomia.com
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