La moda se ha encargado de hacer el resto.

Hace tiempo que comer se ha convertido en algo más que alimentarse. Muchos han convertido de la cocina y de la gastronomía su pasión. Y sabemos que los tatuajes son pura pasión de alguien por algo, «amor de madre» o de lo que se tercie. El resultado, cada vez más, en las tiendas de tatuajes se piden marcas en la piel que nos recuerden a una hamburguesa, un cebollino o nuestro helado favorito. Es todo cuestión de gustos.
Y tú ¿qué plato te tatuarias?
REDACCIÓN Gastronomia.com
IMÁGENES: cuerpoyarte.com, adictamente.blogspot.com.es