Desde diferentes asociaciones ecologistas asturianas se está dando la voz de alarma por el incremento del número de pesqueros de arrastre en las costas del norte de España. Esta actividad afecta tanto a aguas interiores, como a playas e islas de la costa. Los pescadores artesanales de la zona se ven perjudicados por el aumento en las últimas semanas de estas prácticas ilegales por parte de barcos españoles y portugueses.
Estos pescadores estarían utilizando métodos que dañan la supervivencia de las especies autóctonas y modifican los ecosistemas de la costa. Según los denunciantes, entre los puertos base utilizados por estos infractores, podría estar el de Musel en Gijón.
Las autoridades pertinentes han tomado nota de las denuncias realizadas, y se han compromentido a intensificar el control para detectar y frenar estas prácticas irregulares.
Redacción: gastronomia.com
