Desde la Edad Media, los banquetes opulentos, las celebraciones religiosas, los vapores etílicos de la bebida o el régimen cotidiano de las comidas han sido reflejados de una u otra forma por la poesía, el teatro y la narrativa.
Este maridaje entre literatura hispánica y gastronomía se recoge en una monografía presentada el pasado viernes y que recoge las aportaciones de más de 50 jóvenes investigadores, "Sobremesas literarias: en torno a la gastronomía en las letras hispánicas", editada por Biblioteca Nueva.
Jesús Murillo y Laura Peña han coordinado esta obra en al que no solo el elemento primario de la bebida y de la comida forma parte de un sinfín de páginas, sino que otros ingredientes relacionados con ellas son objeto de este estudio : el canibalismo de las sociedades tribales americanas, la siempre necesaria revisión de los mitos clásicos o las tertulias literarias de los siglos pretéritos tienen cabida en esta monografía que no pretende ser más que un punto de partida sobre el amplio menú de las letras hispánicas, siempre sazonado con la comida y la bebida, la risa y el llanto.