El tiempo seco en el sureste del país está dejando en una situación crítica a los agricultores. Han saltado todas las alarmas de AEMET y el sistema nacional de seguros agrarios, en especial el seguro de sequía de pastos, por los graves daños en las producciones agrarias de secano. Las principales producciones afectadas han sido los cereales de invierno y leguminosas, incluyendo el almendro, vid y olivar, la ganadería en extensivo (ovino y caprino) y la apicultura.
En una reunión entre el Gobierno y las principales organizaciones profesionales agrarias (ASAJA, UPA y COAG), el subsecretario de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Jaime Haddad, ha explicado que a pesar de la falta de precipitaciones, el nivel de las reservas hidrográficas «conserva valores muy por encima de la media de los últimos 10 años». La Cuenca Hidrográfica del Júcar se sitúa al 53% de su capacidad y la del Segura al 76%.
La sequía que se cierne sobre el Levante peninsular no tiene comparación en más de 150 años (desde que se tienen registros). Por eso y a pesar de las lluvias en las cabeceras de los ríos (lo que mantiene a buen nivel las reservas hidrográficas) buena parte de los cultivos ya están con serios problemas o directamente arruinados.
Según la agencia meteorológica estatal, las precipitaciones han estado muy por debajo del valor medio, un déficit de agua especialmente pronunciado en Valencia y Murcia.
Haddad ha manifestado su voluntad de diálogo con los representantes del sector, a los que ha solicitado su colaboración en este tema, comprometiéndose a «analizar las propuestas que se le presenten y a estudiar distintas fórmulas que permitan aliviar la situación de los sectores más afectados».
REDACCIÓN gastronomia.com