La sangría sólo se comercializará como sangría cuando haya sido producida en España y Portugal. Así lo ha acordado el Parlamento Europeo en una nueva normativa sobre el etiquetado y la protección de las indicaciones geográficas de los productos vitivinícolas aromatizados.
El resto de países podrán elaborar la receta, pero en ningún caso podrán introducirla en el mercado como sangría. La comercializarán como «bebida aromatizada a base de vino» y tendrán la obligatoriedad de indicar el país de procedencia. Pretenden así proteger la elaboración de tradición autóctona en la península Ibérica frente a otras elaboraciones.
Y los Estados tendrán un año para empezar a aplicar la normativa. Según se informa desde la Eurocámara la norma cuple así los requisitos de la Organización Mundial de Comercio que define los criterios de reconocimiento de las indicaciones geográficas. Esta normativa también se aplicará sobre la clarea, con una elaboración similar, pero a partir de vino blanco.
Receta de Sangría
REDACCIÓN gastronomía.com