Desde principios del siglo XX nuestra familia está dedicada al cultivo de los olivos y la adquisición de olivas para elaborar Aceite de Oliva Virgen Extra. Durante años, las olivas se han molturado en el molino aceitero tradicional de Torrevelilla (Teruel). Manos expertas han seleccionado los mejores frutos y después de una vigilancia constante en el proceso de molturación, prensado y almacenaje, hemos obtenido el producto más valioso del Bajo Aragón: el aceite de oliva. En 1995 la empresa se trasladó a Alcañiz, al Polígono Industrial Las Horcas. Los nuevos tiempos exigían una profunda transformación. Se construyó un edificio diseñado para albergar las más modernas instalaciones con maquinaria puntera en la elaboración del Aceite de Oliva Virgen Extra por medios mecánicos, manteniendo el producto sus características naturales. Día a día la empresa se renueva para ofrecer a nuestros clientes los mejores productos, uniendo la experiencia del continuo trabajo de varias generaciones a las más modernas tecnologías.