Quesos Victorino
Sus instalaciones ganaderas ubicadas en el barrio de El Pinar, Puntagorda, alberga la manada, de unos 50 ejemplares, los cuales atiende con mucho cariño para obtener una producción de leche de gran calidad, para la elaboración de queso palmero. En algunas épocas donde la raza palmera no fue correctamente considerada fue un bastión en el mantenimiento de dicha raza, evitando cruces y manejos erróneos, siendo así una impulsora en el fomento y conservación de la pureza de la cabra palmera. Dichas cabras basan su alimentación en una mezcla de cereales, los cuales cumplimentan el aporte de forrajes frescos locales como el brezo, faya y pino. Tras el ordeño el cual realiza a partir de las 8 de la mañana se dispone a la elaboración del queso. El proceso de elaboración es el tradicional respetando tiempos y medidas regulados por el manual de calidad y procedimientos del CRDOP Queso Palmero. La leche que utiliza en sus quesos procede íntegramente de la propia explotación y es ordeñada a primera hora de la mañana. Tras el filtrado se añade el cuajo y se deja reposar durante 45 minutos a temperatura controlada. La masa resultante se fracciona y se introduce en moldes pequeños (para quesos de entre uno y dos kilos de peso) o grandes (para los llamados quesos de manada, de más de 8 kilos). La sal marina producida artesanalmente en el sur de la isla se utiliza para dar sabor a las piezas, mediante su aplicación en seco sobre cada una de ellas. Y como resultado de este proceso artesanal de elaboración de queso de cabra, obtiene un excelente queso de gran calidad y sabor.