Se puede utilizar como acompañante de gran cantidad de platos, como por ejemplo pescados fritos o cocidos y en la ensaladilla rusa. Para darle un toque especial se le añadirá un diente de ajo o corteza de limón. Recuerda que se debe consumir poco después de prepararla, y no volver a utilizar si sobra.
Ingredientes:
Para 4 personas
- 1 huevo
- ¼ litro de aceite
- Zumo de medio limón o el equivalente en vinagre
- Sal
Elaboración:
- En una batidora metemos el huevo entero, zumo de limón, aceite y un poco de sal, y batimos.
- Cuando la mezcla haya alcanzado la consistencia adecuada, rectificamos de sal y echamos en una salsera, que metemos en la nevera.
- En caso de hacerla a mano, utilizaremos 2 yemas de huevo y más cantidad de aceite, por ejemplo ½ litro. Echamos a continuación las yemas en un cuenco o recipiente hondo y redondo y batimos con las varillas.
- En ese momento añadimos el vinagre o el zumo de limón - media cucharada- y un poco de sal.
- Removemos de forma continuada en el mismo sentido y vamos añadiendo muy poco a poco el aceite.
- Trabajamos hasta que echemos todo el aceite y la consistencia sea bastante cremosa. Ahí es cuando ya podemos agregar otra media cucharadita de vinagre o limón.
- Por último, servimos en una salsera o guardamos en la nevera hasta que vayamos a disfrutar de ella.
- Si se corta, habrá varias formas de solucionar el problema: una de ellas es añadir un chorrito de leche caliente y batir hasta que consiga la textura que deseemos. Otra es poniendo una yema de huevo en la batidora o recipiente y verter lentamente la salsa, que tendrá que unirse bien.
REDACCIÓN Gastronomia.com