Los consumidores españoles hemos cambiado las tiendas de alimentación tradicionales por los supermercados e hipermercados. La consultora Nielsen ha puesto cifras a esta tendencia de la que todos somos conscientes: durante las últimas tres décadas en España han cerrado unas 70.000 tiendas de ultramarinos -casi el 80% - ; por el contrario, el número de supermercados ha crecido en el mismo periodo a un ritmo vertiginoso, pasando de 1.600 en el año 1985 a 18.500 en el año 2015, y también el de los hipermercados, que han pasado de 72 a 449 en el mismo periodo.
Los datos son consecuencia de los cambios en el sector de la distribución y en los hábitos y conductas de los consumidores que optamos por los grandes centros por varios motivos, entre ellos, la falta de tiempo, la gran cantidad de referencias existentes y los precios más competitivos que pueden ofrecer. A las tiendas tradicionales acudimos, en general, solo puntualmente cuando se necesita algún producto en particular.
El informe apunta a otro modelo de negocio, la venta online de alimentos que crece de forma lenta pero continua. Según Nielsen, actualmente 1 de cada 10 consumidores que realizan compras de productos alimentarios, ha comprado a través de internet.
